Santiago 1 Dic. (ATON) -
Más de 350 personas continúan desaparecidas y cerca de 1,1 millones han resultado damnificadas por el clima que se mantendrá con intensas lluvias en las próximas horas.
Las autoridades de Sri Lanka han informado este lunes de que la cifra de muertos por las fuertes inundaciones registradas durante la última semana con el paso del ciclón 'Ditwah' ha aumentado a 390, mientras que otras 352 personas siguen en paradero desconocido, por lo que han alertado de que la cifra de víctimas mortales podría seguir aumentando.
El Centro de Gestión de Desastres de Sri Lanka (DMC, por sus siglas en inglés) ha indicado que las operaciones de búsqueda y rescate continúan por cuarto día consecutivo en un intento por hallar más supervivientes, si bien numerosas áreas siguen estando inaccesibles.
Las zonas más afectadas del país se encuentran en los distritos de Kandy, Nuwara Eliya y Bedulla, donde se han constatado más de un centenar de corrimientos de tierra. Kandy es la zona con más fallecidos, 88, según el último balance oficial.
El domingo, el piloto de un helicóptero que participaba en los dispositivos de emergencias falleció tras sufrir un accidente cuando realizaba labores de búsqueda y rescate.
El presidente del país, Anura Kumara Dissanayake, ha reconocido que se trata de uno de los "desastres naturales más desafiantes de la historia del país" y ha lamentado las dificultades con las que se están topando los trabajadores de emergencias y protección civil, otras agencias de la ONU y ONG.
El domingo declaró el estado de emergencia pública para todo el país para "garantizar la seguridad, mantener el normal funcionamiento del país y salvaguardar los suministros y servicios necesarios para la vida pública".
Por su parte, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha anunciado que ha comenzado ya a distribuir ayuda no alimentaria en coordinación con las autoridades de la isla.
"La gente de Sri Lanka no ha visto una destrucción tan extendida desde hace años", ha destacado la jefa de la misión de la OIM en Sri Lanka, Kristin Parco. "Las comunidades han quedado desarraigadas y muchas familias están en refugios saturados y provisionales", ha resaltado.
Parco ha indicado que están entrando en la fase "crítica" de esta emergencia, por lo que movilizar ayuda humanitaria es "esencial" para reducir el impacto sobre los desplazados.
Más de 1,1 millones de personas se han visto afectadas por las inundaciones y se calcula que hay 209.000 desplazados. Los pronósticos del Departamento de Meteorología del Gobierno ceilandés apuntan a que las lluvias continuarán en las próximas horas en varias zonas del país.
Las ráfagas de viento han llegado a alcanzar los 90 kilómetros por hora y en las zonas de costa las olas han llegado a los tres metros de altura, lo que ha provocado una situación complicada en el mar en varias regiones, calificada por la agencia estatal como "muy agitada".
Europa Press / Aton Chile