Santiago 28 Dic. (ATON) -
El presidente del Partido Comunista afirmó que serán una oposición activa, respaldando los compromisos con la gente y cuestionando aquello que se aleje de ellos.
En medio de los cuestionamientos surgidos tras el último pleno del Partido Comunista, su presidente, Lautaro Carmona, salió a aclarar este domingo el sentido de la estrategia definida por la colectividad de cara al próximo ciclo político, marcado por la llegada de José Antonio Kast a La Moneda.
En conversación con Radio Nuevo Mundo, Carmona explicó que las conclusiones del pleno entre ellas el llamado a impulsar hitos de movilización como el Día de los Trabajadores o el Día de la Mujer deben leerse en un contexto específico. Quiero dejar muy bien sentado que lo hicimos sobre la base de que las tareas de evaluación de lo que fue la jornada político-electoral del 14 de diciembre y que constituyó un golpe muy duro (...) Por tanto, nunca había una pretensión de los debates de los otros partidos. Estamos hablando de nuestro debate , afirmó.
El timonel comunista subrayó que el PC no busca interferir en los procesos internos de otras colectividades ni instalar lecturas sobre evaluaciones ajenas. En ese sentido, abordó la relación entre el actual gobierno y los resultados electorales recientes. Estoy, por ejemplo, refiriéndome a una asociación ya casi instalada de la relación que tiene nuestra pertenencia y el curso que tiene nuestro gobierno que encabeza el presidente Boric y los efectos en una campaña o candidatura, entre comillas, de continuidad. Bueno, eso será motivo de la evaluación que haga el gobierno para conocer más al detalle, pero uno no puede dejar de registrar que ese es un factor. Lo mismo la conducción de la campaña misma", sostuvo.
Carmona también descartó de plano que el Partido Comunista esté promoviendo escenarios de desestabilización del gobierno electo o alteraciones al orden público. Junto con ello, rechazó que la colectividad ejerza control sobre los movimientos sociales. Para el Partido Comunista, en forma histórica, los movimientos sociales, sobre todo el movimiento sindical, tienen vida propia. (...) Malamente, podría el Partido Comunista tratar de darle centralidad de carácter político, ideológico, a una central. Nunca, nunca, lo ha hecho en toda la historia del movimiento sindical chileno", aseguró.
Frente a las acusaciones de que el PC buscaría instrumentalizar esas organizaciones para tensionar al próximo Ejecutivo, el dirigente fue categórico. Señaló que esa lectura es una provocación dirigida a afectar la influencia, la importancia, la incidencia histórica que tiene el Partido Comunista, en la cual nosotros no vamos a caer".
No vamos a entrar en ese juego, porque tenemos suficiente titularidad, suficiente presión para que hable por sí misma. Y va a quedar demostrado, y ahí espero yo que vengan las explicaciones de los que nos están a nosotros endosando estas movilizaciones. Cometeríamos el peor de los errores de apropiarnos de movimientos que superan lejos las militancias, pero son legítimas más allá de que esté un partido o esté otro", añadió.
Finalmente, aunque evitó profundizar debido al conclave que sostendrán en enero los partidos oficialistas junto a la DC, Carmona adelantó cómo se posicionará el PC desde el 11 de marzo. Hemos dicho, seremos una oposición que va a respaldar todas las medidas que vayan en la dirección de cumplirle a la gente y seremos una oposición que va a cuestionar en forma muy activa todo lo que se aleje y olvide los compromisos que hicieron con la gente".