Santiago 29 Nov. (ATON) -
El desayuno entre ambas generó molestia en sectores opositores, que acusaron a la exjefa de Estado de mezclar su candidatura internacional con apoyo político interno.
En medio del reordenamiento político previo a la segunda vuelta presidencial, un desayuno entre la expresidenta Michelle Bachelet y la abanderada oficialista Jeannette Jara desató duras críticas desde la UDI y el Partido Republicano. Parlamentarios de ambos sectores cuestionaron el gesto y afirmaron que la exmandataria debe definir si respaldará la campaña o si continuará enfocada en su postulación a un cargo en Naciones Unidas.
La controversia se produce a poco más de dos semanas del balotaje y también después de la reunión entre el expresidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle y el candidato del Partido Republicano, José Antonio Kast.
Tras el encuentro entre Bachelet y Jara, el diputado republicano Stephan Schubert afirmó que la exmandataria tiene que responder con qué finalidad lo hizo o qué efecto ella espera que esto tenga . Añadió que, a su juicio, el gesto no altera el escenario electoral: En la práctica, vemos que no mueve la aguja de la candidata del Partido Comunista (PC). Sigue con o sin el apoyo de la expresidenta Bachelet en la misma posición, lo que nos tiene muy contentos y que nos da la esperanza de que el futuro presidente de la República va a ser José Antonio Kast .
Desde la UDI, el diputado Jorge Alessandri endureció aún más el tono y emplazó directamente a la exjefa de Estado: Como todos los chilenos le estamos financiando esa campaña, como va a ser una decisión del que gane respaldarla o seguir respaldándola o no, nosotros creemos que tiene que elegir: o va a representarnos a todos en la ONU o se la va a jugar por la candidatura del PC . El parlamentario agregó: O trabaja para todos los chilenos o está en un sector político, en un nicho apoyando a una candidata: Tiene que elegir .
Su correligionario Daniel Lilayu, en tanto, sostuvo que el gesto de Bachelet es una acción reactiva con el impacto mediático que tuvo la reunión del expresidente Frei con José Antonio Kast, donde el centro o la Democracia Cristiana (DC), representada por un expresidente, le da al candidato Kast un gran apoyo .
La decisión de Frei de reunirse con Kast ya había generado otra controversia: el Tribunal Supremo de la DC suspendió su militancia, desatando una ola de críticas internas. Un grupo de militantes del partido Demócratas varios de ellos ex DC emitió una declaración pública calificando la sanción como una medida poco inteligente e irracional .
En paralelo, el oficialismo busca capitalizar el respaldo de Bachelet, mientras la oposición intenta reforzar la idea de que la exmandataria cruza una línea de prescindencia al involucrarse en la campaña.