Santiago 20 Dic. (ATON) -
El persecutor valoró el rol de la Contraloría en observar irregularidades y subrayó que la actuación del Estado debe ser permanente.
Hace poco más de siete meses, bajo estricta reserva, el fiscal regional Occidente, Marcos Pastén, comenzó a delinear la investigación que culminó con la detención de 47 gendarmes y 23 civiles. Se trata del mayor golpe contra las redes de corrupción al interior de las cárceles chilenas.
En entrevista con La Tercera, el fiscal, quien desde abril de 2024 lidera el foco penitenciario, advierte que la problemática no se resuelve únicamente con sacar de circulación a los involucrados. Para él, la llamada Operación Apocalipsis debe marcar un antes y un después, con medidas definitivas que frenen los tentáculos del crimen organizado y sus intentos de capturar instituciones. Espero que la Operación Apocalipsis sea un shock y se tomen medidas definitivas en Gendarmería, si no todo este trabajo será en vano , enfatizó.
LA RED Y SUS ALCANCES
El fiscal explicó que los exfuncionarios operaban bajo absoluta soltura y comodidad, dedicados por completo a la comisión de delitos y coludidos con personas externas. Los pagos permitían desde visitas fuera del reglamento hasta el ingreso de alimentos o teléfonos celulares. Estos sujetos manejaban cantidades estratosféricas de dinero sólo una palta podía costar 10 mil pesos , relató, subrayando la magnitud del negocio ilícito dentro de los recintos penitenciarios.
La investigación reveló que no existía un cabecilla único, sino un funcionamiento horizontal, con utilidades repartidas y estilos de vida desordenados, marcados por el consumo de drogas y fiestas. Además, algunos buscaban expandir el negocio hacia otras unidades, incluso en el sur del país.
ALERTAS INSTITUCIONALES
Pastén señaló que el caso enciende alarmas sobre los mecanismos de selección y seguimiento en Gendarmería. ¿Es prudente que funcionarios tengan esta cantidad de cuentas? ¿Es razonable que compren inmuebles al contado? Hay que ir mirando cómo crecen sus patrimonios , cuestionó, planteando la necesidad de sistemas de control más estrictos y evaluaciones periódicas de quienes trabajan en contacto con la población penal.
El persecutor insistió en que la función pública conlleva responsabilidades mayores y que debe existir transparencia respecto de los bienes adquiridos por los funcionarios. Uno también debe estar disponible para responder por las cuestiones que va adquiriendo: cómo compré un auto, una casa , agregó.
DESAFÍO DEL ESTADO
Para el fiscal, la trascendencia del operativo radica en demostrar que el Estado puede recuperar espacios cooptados por organizaciones criminales. No puedes pretender controlar el crimen organizado al interior de las cárceles si no tienes el control absoluto de los establecimientos penitenciarios , afirmó.
Pastén valoró el rol de la Contraloría en observar irregularidades y subrayó que la actividad del Estado debe ser permanente. La única posibilidad que tenemos es seguir avanzando, compartiendo información y que el Estado actúe, porque de lo contrario el panorama se avizora oscuro , advirtió.
REFORMAS Y RESPONSABILIDADES
El fiscal sostuvo que Gendarmería tiene plena conciencia de su responsabilidad para evitar que estos hechos se repitan. Respecto a la reforma anunciada por el Presidente Boric, que plantea que Gendarmería dependa del Ministerio de Seguridad, señaló que la medida sólo será efectiva si implica más equipos investigativos y recursos .
Conozco a Gendarmería, porque trabajé allí. La inmensa mayoría de los funcionarios son honestos. Pero también estoy convencido de que hay que actuar , dijo, reiterando que la operación debe ser un punto de inflexión, "debe significar una transformación de la entidad".
Finalmente, Pastén apuntó a todos los actores con poder de decisión -Ejecutivo, Legislativo, Ministerio Público y Contraloría- como responsables de transformar la evidencia empírica en cambios reales. En paralelo, el Ministerio Público solicitó prisión preventiva para los gendarmes involucrados, medida que, de concretarse, podría cumplirse en la Cárcel de Alta Seguridad para impedir la reinstalación de redes criminales.