Santiago 21 Dic. (ATON) -
A su juicio, Evelyn Matthei nunca consiguió encarnar esa impronta de firme oposición a la izquierda, lo que debilitó a Chile Vamos .
Hace un año, la exministra Marcela Cubillos se trasladó a Madrid, donde su esposo, el excanciller Andrés Allamand, lidera la Secretaría General Iberoamericana. El viaje marcó un retiro temporal de la política chilena tras su sorpresiva derrota en la alcaldía de Las Condes frente a Catalina San Martín.
Desde la capital española, Cubillos habló con La Tercera y aseguró observar con distancia, pero con claridad, el escenario político nacional: afirmó que la batalla de las derechas la ganó José Antonio Kast y que su triunfo representa no sólo una victoria electoral, sino también política.
Cubillos reconoce que apoyó las campañas con las que se sentía más cercana, en particular la de Kast, con cuyo programa se identificaba plenamente. Voté por él en primera y segunda vuelta , afirma, subrayando que el liderazgo republicano logró aglutinar las fuerzas que se habían manifestado en el Rechazo a la propuesta constitucional. A su juicio, Evelyn Matthei nunca consiguió encarnar esa impronta de firme oposición a la izquierda, lo que debilitó a Chile Vamos .
Cubillos sostiene que el clivaje del Sí y el No quedó atrás y que el verdadero eje político surgió desde la Convención . En ese terreno, dice, Kast representó mejor la opción de una derecha firme, que no se adaptó a las encuestas y que se mantuvo en pie cuando el país giraba hacia la izquierda. El mérito es que uno es siempre como es, y de repente te eligen y de repente no , reflexiona, recordando su propia derrota en Las Condes.
Respecto al programa del nuevo presidente, destaca la noción de gobierno de emergencia, centrado en seguridad, economía y educación . Para Cubillos, esa definición permite priorizar lo urgente sin renunciar a las ideas de fondo . Incluso compara a Kast con Patricio Aylwin, quien asumió un Chile dividido y buscó gobernar para civiles y militares. Kast puede recuperar un horizonte común , asegura.
La exministra advierte que reducir el triunfo republicano a una mera estrategia electoral es un error. Claramente había dos miradas de país y la gente eligió , sentencia, rechazando los análisis que buscan restar legitimidad democrática a la elección. En su opinión, el liderazgo de Kast se consolidó porque perseveró cuando muchos lo daban por descartado .
Cubillos observa también el futuro de Chile Vamos, al que considera desdibujado por su insistencia en acuerdos transaccionales. Prefiere hablar de colaboración antes que de coalición , y cree que el sector debe revisar la forma en que elige a sus candidatos presidenciales. No basta con la popularidad en encuestas, se necesita liderazgo político consistente , afirma.
Aunque descarta sumarse al gobierno desde España, Cubillos insiste en que apoyará desde fuera el éxito del proyecto republicano . Para ella, el triunfo de Kast marca un cambio de cancha en la política chilena: Llevamos décadas discutiendo cuánto se suben los impuestos; ahora vamos a empezar a discutir cuánto se bajan .