Publicado 08/06/2023 11:17

El trabajo del Centro de Investigación de Viña Concha y Toro para enfrentar el cambio climático

Archivo - Barricas.
Archivo - Barricas. - Viña Concha y Toro - Archivo

Madrid, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -

En el corazón del Maule, principal valle vitivinícola de Chile, la compañía chilena está desarrollando iniciativas de vanguardia mundial en su propio Centro de Investigación e Innovación (CII) que ya empieza a dar prometedores frutos.

El cambio climático es una realidad y en Viña Concha y Toro se han venido tomando medidas concretas para enfrentar este escenario de mejor manera, temática en la que el CII de la compañía ha sido un pilar en el desarrollo de soluciones adaptativas, que se ponen a prueba con la finalidad de ir incorporando en el quehacer del negocio.

"Hace más de 8 años creamos el CII de Viña Concha y Toro, un centro único en Latinoamérica y el mundo para la investigación vitivinícola con capacidades de última generación. La búsqueda incansable de la excelencia, los avances concretos para enfrentar el cambio climático global y abordar los desafíos de la industria del vino frente a la dinámica de los avances científicos y tecnológicos, son el motor de este gran espacio de integración entre productores, investigadores, el sector público, académico y privado, que resulta en un ecosistema virtuoso para la transferencia de conocimientos y tecnologías a nivel nacional e internacional", explica Álvaro González, director del Centro de Investigación e Innovación de Viña Concha y Toro.

Es así como de los cinco programas estratégicos del quehacer del CII, uno está exclusivamente dedicado al Cambio Climático y la calidad del vino, con prometedores resultados en ahorro de agua para riego, entre otros. "Uno de los recursos cruciales tanto para la industria del vino en particular como para la humanidad en general es el agua. Para su óptima utilización y cuidado es de vital importancia calcular con precisión la demanda exacta que un cultivo requiere, dadas sus características y las de su entorno. Medir los efectos del déficit hídrico y la evapotranspiración mediante tecnologías micro-meteorológicas e imágenes satelitales, permite ajustar los objetivos productivos y cualitativos como nunca antes", comenta el investigador líder del programa, Sebastián Vargas.

En concreto, el CII desarrolló una plataforma de gestión agrícola llamada SmartAgro, la que, a través de un sistema de información geográfico, permite interactuar con bases de datos de nuestros fundos, visualizar índices de vegetación basados en imágenes satelitales (como por ejemplo el índice NDVI con una resolución temporal de 5 días y espacial de 10 m por pixel), dar recomendaciones específicas de riego, hacer estimaciones del volumen de cosecha basadas en inteligencia artificial y monitorear información nutricional del viñedo. Además, permite que los administradores de los fundos cuenten con información meteorológica en tiempo real de estaciones de la red METEOVID.

Esta tecnología fue piloteada en más de 1.100 hectáreas entre Limarí y Maule, incluyendo un piloto en Trivento en Argentina, generando un ahorro promedio en el consumo de agua para riego de 18%. También permitió la predicción del volumen de cosecha a través de un modelo de IA, sin muestreo en campo, con una precisión de 85% +- 10%, y monitorear el estado nutricional del viñedo a nivel de predio, a través de análisis foliares realizados por el CII.

Otros casos de éxito del CII

Plantas 2.0: vid mejor preparada para el cambio climático

Dentro de los casos de éxito, se mostró Plantas 2.0, las cuales son plantas libres de los virus más dañinos desde el punto de vista productivo y cualitativo. Estas plantas permitirán lograr mayores producciones y una mayor vida útil del viñedo. Las primeras plantaciones se efectuaron durante el 2022.

Este logro es el resultado del trabajo conjunto de la Gerencia Agrícola y el CII de Viña Concha y Toro, de un programa que se inició en 2016 en base a una plataforma tecnológica y analítica más robusta basada en qPCR, la cual ha permitido realizar la mayor selección sanitaria (virus y hongos de la madera) de materiales vegetales para la industria nacional. Esta planta no involucra un proceso de mejoramiento genético.

Las plantas 2.0 son más sanas, con lo cual se apunta a un potencial productivo y de longevidad mayor que sus antecesoras. Son, por tanto, plantas que estarán más preparadas para el cambio climático, explica González. La primera plantación de las Plantas 2.0 se llevó a cabo en octubre en el Fundo El Triángulo de la compañía, ubicado en la Quinta Región, lo que marca el inicio de un nuevo estándar de calidad de las plantas que se hacen en el vivero de la Gerencia Agrícola de Viña Concha y Toro.

Compost

Las investigaciones en el Compost, en donde a través de una colaboración junto a Concha y Toro, Cono Sur y Viñedos Emiliana, el Centro ha explorado nuevas alternativas de elaboración de compost aumentando la eficiencia del proceso y la calidad del producto final.

Acerca del Centro de Investigación e Innovación

El Centro de Investigación e Innovación (CII) fue inaugurado en 2014 en la Región del Maule. Esta iniciativa pionera fue concebida para hacer investigación aplicada y desarrollar nuevas tecnologías en las áreas de la viticultura y enología, buscando contribuir al desarrollo y competitividad de la industria del vino en Chile y el mundo, nutriendo de conocimientos y nuevos desarrollos que permitan enfrentar los futuros desafíos del sector.

El CII cuenta con un Laboratorio Agrícola y Enológico, un Laboratorio de Biología Molecular, una Bodega Experimental y un Centro de Extensión. Cada área, que cuenta con tecnología de punta, aporta al objetivo de hacer de la industria vitivinícola una más eficiente y competitiva. A través de su Centro de Extensión y diversas alternativas de capacitación, se pueden difundir nuevos conocimientos y tecnologías para ser incorporados a las prácticas vitivinícolas y enológicas. El Centro ha logrado importantes avances en investigación aplicada a través de toda la cadena productiva, respondiendo a los desafíos de calidad, adaptabilidad y productividad de la industria.