MADRID 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
El responsable del Departamento de Estado de Estados Unidos para temas del norte de África, Joshua Harris, ha trasladado a las autoridades marroquíes durante una visita a Rabat que su plan de autonomía para el Sáhara Occidental tiene un "enfoque potencial" para satisfacer las aspiraciones del pueblo saharaui.
Así, el alto funcionario estadounidense ha reafirmado ante el ministro de Exteriores marroquí, Nasser Burita, el apoyo de Washington al plan de autonomía para la antigua colonia española, un proyecto que ha catalogado como "serio, creíble y realista", según se desprende de un comunicado de la Embajada estadounidense en Rabat.
En una reunión con Burita, y en la que también ha participado el embajador estadounidense en Rabat, Puneet Talwar, Harris ha reafirmado el compromiso de Washington con el "proceso político" iniciado por la ONU para resolver la cuestión saharaui, a la par que ha incidido en la importancia de colaborar con el enviado especial de Naciones Unidas, Staffan de Mistura.
"Harris (...) ha abordado la importancia de colaborar con el enviado especial con un espíritu de realismo y compromiso, a medida que intensifica sus esfuerzos para lograr una solución política duradera y digna para el Sáhara Occidental", ha manifestado la Embajada estadounidense en Rabat a través de un comunicado.
Así las cosas, Harris y Talwar han resaltado ante Burita "la profunda e histórica asociación" entre sus respectivos países, a la par que han trasladado su gratitud por "los esfuerzos cruciales" desempeñados por Marruecos "en una amplia gama de desafíos regionales y globales", incluida la situación en la región del Sahel.
El Gobierno estadounidense informó ya a comienzos de mes de la visita de Harris a Rabat, donde también tiene previsto verse con representantes del Frente Polisario, incluido su secretario general, Bahim Ghali, según informaciones adelantadas por la agencia de noticias saharaui SPS.
Los contactos entre Washington y las partes se han intensificado en las últimas semanas, llegando incluso a producirse una llamada telefónica entre la secretaria de Estado adjunta para Asuntos Africanos, Molly Phee, y el ministro de Exteriores de Argelia, Ahmed Attaf, aunque con la situación en Níger tras el golpe de Estado como principal punto en la agenda.